Cuando impartes una asignatura con mucho contenido teórico, como puede ser Ciencias Sociales, Historia, Ciencias Naturales, etc, corregir preguntas de desarrollo es un verdadero martirio, ya que es muy difícil evaluar al mismo tiempo la presencia de los contenidos adecuados y la adecuada composiciñon de ellos en un escrito, siguiendo las normas de la cohesión y coherencia de los texto.
Es evidente que la mayoría de los profesores nos decantamos por evaluar la presencia de los contenidos que la pregunta precisa, dejando de lado la adecuación escrita del texto. Esto probablemente sea un craso erro, debido a que a escribir se aprende escribiendo y corrigiendo los errores no solo en la asignatura de Castellano, sino en todas. Nosotros, en nuestro centro, hemos apuntado al buen camino, ya que, como paso intermedio, la faltas de ortografía descuentan lo mismo en todas las asignaturas.
De cualquier manera, lo más adecuado es compatibilizar ambos procedimientos, es decir, establecer unos criterios mínimos y corregir y evaluar la adecuación del texto.