Aprovechando el esquema clásico de divergencia-convergencia, he querido destacar algunos de los elementos que considero fundamentales en el proceso creativo comunitario, que pueden explicarse a los alumnos adaptando el discurso a su edad y contexto.

Pretendí reflejar la idea de un proceso que termina desintegrándose para volver a integrarse en un continuo que puede responder a la idea de la innovación, que exige que estemos siempre en un estado de ánimo más o menos dinámico. Esta idea del continuo creativo me parece importante.

En la parte divergente del dibujo, encontramos a los participantes comenzando a confluir en una línea común. En esta parte, como es preceptivo, cada uno aporta su perfil creativo ( en pos de la idea común, ganando progresivamente capacidad de concentración.

El aplazamiento del juicio viene siendo representado como la columna vertebral del proceso, al que le he añadido la pasión creativa que se comparte, utilizando esa especie de corazón centrifugado. Estos dos con ceptos, también me parecen centrales e insoslayables.

A partir de ahí, toma carácter de realidad el objetivo común, que no pierde los matices que las personas involucradas aportan; pero que gana el peso específico que le otorga el equipo: ese NOSOTR@S que es el que hace real y tangible la creación colectiva. El fondo de esa parte del gráfico tiene una cuadrícula que representa la sistematización y el orden subyacente que aporta solidez y posibilidades de evaluación al conocimiento o producto generado. Equipo, comunidad, sistematización, evaluación... son palabras clave que se pueden tratar en esta parte.

Llegando al final del trayecto, el proceso va perdiendo fuerza hasta que se desintegra, a la espera de volver a comenzar en el extremo opuesto.

(Mét: supongo que da para una exposición y posterior debate, además de introducir muchos conceptos que se pueden desarrollar a posteriori sobre creativas y comunidad)

Espero que lo encontréis útil