Durante los últimos treinta años se han practicado muchas “cosas” sueltas, y el esfuerzo personal ha sido inmenso, pero a juzgar por los resultados tras treinta años de andadura podemos decir que al empezar cualquier intento de integrar las nuevas tecnologías en el currículo de las asignaturas volvemos a empezar de cero. O si somos considerados podríamos decir que tenemos que hacer un serio planteamiento de las tecnologías en la educación.

Porque una cosa es introducir las tecnologías en el currículo, cosa que no cuesta nada, y otra muy diferente que esté integrada. También puedo introducir un loro en clase, pero no estará introducido en el currículo porque no pinta nada.

Igualmente pasa con las nuevas actividades que intentas en clase, pueden estar introducidas en el currículo; pero, ¿están realmente integradas en el currículo? Para que algo esté integrado en un todo debe cumplir unos principios: no molestar al resto (aportar continuidad al total), aportar algo nuevo y tener el rendimiento (provecho/esfuerzo) mas óptimo posible entre otras opciones. Pues lo mismo ocurre en el currículo; algo no está integrado si no cumple estos requisitos básicos:

• No debe interrumpir el funcionamiento de los otros integrantes del currículo: no debe absorber mas tiempo en detrimento del resto, no debe perjudicar el aprendizaje del resto. Debe formar parte del tejido curricular. No debe provocar discontinuidad en el currículo.

• Debe aportar algo nuevo al aprendizaje del alumno. Puede estar integrado en el currículo pero ¿ayuda a conseguir un contenido distinto en el currículo global? Para justificar la utilización de una actividad o recurso hace falta preguntarse si aporta algo nuevo o solo tiene un papel continuador de los contenidos ya adquiridos con antelación o si es una mera actividad complementaria.

• El rendimiento de ese recurso o actividad también es importante. No basta con que aporte continuidad y algo de provecho, también hace falta preguntarse: ¿Hay otra manera de conseguir lo mismo más efectivo y con menos recursos (temporales y materiales)?

Es difícil evaluar a priori estos requisitos, pero se pueden evaluar a posteriori si no tememos habernos equivocado.